Esta investigación se desarrolla en el marco del programa de investigación “Educación y Territorialidad”, ejecutado en convenio entre CERES y la Comunidad de Estudios JAINA. El área de estudio se encuentra en la provincia O´connor, en la región conocida como Territorio Indígena Guaraní del Itika Guasu, en el Departamento de Tarija. Este territorio presenta una estructura poblacional que incluye tanto a grupos guaraníes, quienes conviven en una suerte de tensiones y alianzas que le confieren su carácter muy particular.
La investigación tiene como objetivo visualizar como los procesos educativos producen un efecto directo en la gestión territorial, a partir de las diversas acciones que desarrollan los actores que intervienen en el desarrollo y en la gestión territorial del Itika Guasu. Las ideas guías que orientan la investigación, sostienen que los procesos educativos indígenas y no indígenas generan campos de acción donde el individuo construye en tensión y conflicto la gestión del territorio. El otro supuesto es que la gestión del territorio está directamente relacionada con la posibilidad de controlar y generar nuevos arreglos institucionales en el marco de los procesos educativos. Las diversas acciones desarrolladas tienen una intencionalidad y producen innovaciones ya sea a nivel práctico o estratégico y que el proceso de producción de conocimiento indígena es flexible para incorporar innovaciones, que de forma estratégica le permitan relacionarse de forma más eficiente a un tejido social mayor.
Como resultado del proceso se visualiza un territorio multicultural en el cual se sobreponen normas en vigencia, convergen actores diversas y se desarrollan prácticas que compiten con los recursos. Esta sobreposición se lleva también al plano de autoridades y formas organizativas, planteándonos una asincronía en las configuraciones sociales que se dan como base de la gestión territorial indígena y la configuración territorial desde la visión externa.
Los procesos educativos que se desarrollan en el Itika Guasu traducen su acción en una práctica educativa monolingüe e intervencionista que no se basa en la construcción y en las institucionalidades propias del Pueblo Guaraní, sino en las prácticas y conocimientos de una cultura “occidental” que, sin sistematizar los aportes y conocimientos de las culturas con el fun de fortalecer su identidad propia, yuxtapone los propios.
Las sobreposiciones productivas, orgánicas y de la carga de oferta institucional que tienen, no permite efectivizar una participación ciudadana indígena en ámbitos de gestión “externa. Se está perdiendo hegemonía en el ámbito indígena debido a la sobre posición de funciones, roles, fragmentación social que se genera.
No hay una hegemonía indígena que permita desarrollar una verdadera gestión territorial. Por el contrario nos muestra fragmentación que se da a nivel práctico y que a nivel discursivo es asumido por las organizaciones de representación étnicas.
Autora: Pilar Lizárraga Araníbar